[HanChul] Se acabo el fanservice

Pareja: HanChul

Genero: Lemon, Romance, Yaoi.

Clasificación: NC-17

Recomendado para las amantes del HanChul.

Se acabó el fanservice

Agarro con fiereza el cabello del menor, y estampo sus labios contra los de él, provocando que una placentera corriente recorriera sus cuerpos.

Las manos del teñido se posaron sobre los hombros del más alto, para después ejercer fuerza y hacer que el cuerpo del chino se estrellara contra la pared del cuarto, haciendo que los cuadros que se encontraban colocados en ella temblaran ante la fuerte colisión.

-Heechul, me vas a matar- le dijo Han al mayor.

-Te aguantas, eso te pasa por ponerte a hacer fanservice con Siwon- le dijo mientras sus manos se adentraban debajo de la camiseta del menor y la retiraba.

-Como si tú no hicieras fanservice- le contesto Hangeng.

Ante la respuesta del menor, Heechul bajo su cabeza y mordió con fuerza uno de los pezones del menor.

-Pero tú no eres yo- fue la escueta respuesta del teñido, antes de volver a morder los pezones.

Han Geng solo podía gemir, Heechul estaba enfadado, y adoraba verlo así.

Las manos del chino fueron hasta la cabeza de Heechul, pero este las agarro  con rapidez y le miro a los ojos.

-Hoy mando yo- fue la respuesta de Heechul ante la cara de confusión del menor.

-Pero Heechul- comenzó el menor, pero el mayor estrello sus labios contra los del chino y los mordió furiosamente.

-Si sigues así voy a tener que pedirle las esposas a Ryeo y Yesung- le amenazo mientras sus dientes se clavaban en el moreno cuello del chino, provocando que un sonoro gemido escapara de sus labios- Hannie, no gimas tan fuerte, que te oirán- le dijo mientras sonreía ladino.

Sus manos bajaron por los costados del chino, arañando la suave piel.

-Chul, no me dejes marcas- le dijo el chino con manos sobre sus cabeza, justo donde Heechul se las había dejado.

-Eres mío, y yo hare lo que quiera con tu piel- fue su respuesta, mientras clavaba sus uñas fuertemente, y sus dientes se enterraban sobre la clavícula del menor, dejando una marca roja- Ahora deja de quejarte.

Sus labios volvieron a estamparse contra los de Hangeng, en un beso rabioso que desbordaba pasión.

El chino no aguantaba estar sin tocar la suave y nívea piel del teñido, así que bajo sus manos hasta posarlas en la cadera de Heechul, y coló sus manos por debajo de su camiseta, acariciando y arañando la piel.

-Te dije que hoy mando yo- le recordó Heechul sobre sus labios.

Se separó de él y le agarro de los pantalones, tirando de ellos, conduciéndole hasta la cama, donde le dejo caer. La sonrisa torcida de Heechul se acentuó. El mayor fue hasta el armario y extrajo dos corbatas.

-Puesto que no quiero salir así- dijo señalando a su erección que palpitaba ansiosa dentro de sus pantalones- me las apañare- añadió mientras se posaba sobre las caderas del chino.

-Hangeng, sube las manos- le dijo sonriendo como un niño pequeño.

-Heechul- comenzó el menor.

-Hazme caso, o te quedaras con ganas- le dijo, sonriendo malvadamente, Hangeng no tardo en hacer caso y subir sus manos obedientemente.

Heechul sonrió victorioso y ató las manos del chino al cabecero de la cama, tal vez demasiado fuerte. Hangeng intento mover sus manos pero le era imposible.

-Heechul, por favor- comenzó pero sus palabras fueron acallados por los rojos labios de Heechul.

El teñido comenzó a mover sus caderas, lento para después comenzar a ganar rapidez. Su miembro erecto friccionaba sobre el de Han, arrancado sonoros gemidos de los labios del extranjero.

El beso continuaba rabioso y lujurioso. Ambos bebían del otro como si sus vidas dependieran de ello.

Las manos de Heechul se paseaban libremente por el pecho del menor, dejando marcas de arañazos. Los gemidos de Hangeng se escapaban incontrolables de sus labios.

Las manos de Heechul comenzaron a bajar lentamente, demasiado para el gusto de Han, pero era su tortura. Rozaban la pretina del pantalón del menor provocando ligeras cosquillas que recorrían todo su cuerpo. Heechul observaba la cara del menor con satisfacción. Eso le enseñaría que no se hace Fanservice con quien no se debe.

Heechul comenzó a retirar el pantalón del menor, hasta dejarlo solamente con los bóxer. Las manos de Heechul comenzaron a acariciar sobre la fina tela, haciendo que Hangeng se moviera pidiendo más contacto. 

La lengua del mayor comenzó a humedecer la piel que encontraba a su paso. Desde el cuello del menor, bajando por sus marcados pectorales y delineando cada uno de los músculos de su abdomen. Los gemidos de Hangeng eran cada vez más elevados y más entrecortados, esos que Heechul adoraba.

Cuando Heechul llego hasta el gran bulto que el menor cargaba, se lamio los labios con gula. Cierto era que quería castigar al menor, pero tardando tanto se estaba castigando a sí mismo.

Con rapidez retiro el bóxer del chino y pudo ver como la erección del menor se mostraba preparada para toda atención. Bajo sus labios hasta la rosada carne, que era el glande, y comenzó a dar ligeros besos, que fueron acompañados por sonoros gemidos  por parte del menor. Chul haciendo uso de sus dientes araño la extensión, provocando que ligeras cargas eléctricas recorrieran todo el cuerpo del extranjero. Con deseo Heechul introdujo el miembro de Hangeng entre sus labios y comenzó a succionar lentamente, ayudándose de sus manos, pues con una estimulaba el miembro y con la otra jugaba con los testículos de su amante.

Hangeng, deseaba tocar el cuerpo de Heechul, pero por más que intentara no podía soltarse, por lo que había desistido y entregado su cuerpo al placer que el mayor le ofrecía.

Heechul, quería hacer sufrir al menor así que cuando noto que estaba a punto, paraba todo movimiento, para después volver a comenzar de nuevo. Cuando se canso de su juego se separo de él, sonriendo con verdadera maldad, esa sonrisa que muchas veces recordaba a la del evilmagnae.

Heechul bajo de la cama, y comenzó a retirar lentamente cada una de las prendas de ropa que portaba. Esa escena era demasiada erótica a la vista del chino, el cual solo podía morderse el labio al ver como su novio jugaba con su propio cuerpo mientras se quitaba la ropa.

Cuando hubo retirado todas las prendas, Heechul se sentó sobre las caderas de Han de nuevo. Haciendo que el miembro del menor quedara justo entre sus nalgas.

Heechul llevo dos dedos a los labios de han, incitándole a lamerlos, cosa que el menor hizo sin quejas. Delineando cada dedo como desearía hacer con el miembro del mayor.

El teñido retiro los dedos, cuando los considero lo bastante húmedos, y lentamente los dirigió a su propia entrada, ante la atenta mirada del menor.

-Me encantaría que lo hicieras tu- comenzó Heechul.

-Pues desátame- dijo el menor con voz desesperada, Heechul solo acentuó su sonrisa.

-Lo siendo Hannie- dijo mientras le miraba con ojos inocentes- Pero esto forma parte de tu castigo, ver cómo me toco y no poder tocarme- le informó.

El mayor introdujo su propio dedo en su interior, lentamente. Para después comenzar a aumentar la velocidad. Con su otra mano estimulaba su miembro, complaciéndose a sí mismo.  Los dedos entraban y salían de su cuerpo con rapidez, mientras que los gemidos escapaban de sus labios. Han solo podía gemir y excitarse más al ver tan erótica escena.

-Heechul, por favor- rogo el menor.

Heechul, el cual también estaba deseoso de tener el menor en su interior, saco sus dedos y se coloco justamente sobre el palpitante miembro del menor.

El chico pétalo agarró la erección de su amante y comenzó a deslizárselo en su interior lentamente. Cuando hubo entrado todo, paro todo movimiento. Se inclino y unió sus labios a los del menor, en un beso más lento, pero no menos pasional.

Lentamente Heechul comenzó a moverse. Haciendo que la fricción de sus cuerpos comenzara a ser placentera. Las manos de Heechul estaban apoyadas sobre el pecho del menor, para poder impulsarse. Aunque la acción le estaba costando.

Quería llegar a ese lugar en el que Hangeng siempre lograba hacerle gemir, pero le estaba costando.

-Si me sueltas, yo te hare gemir- le dijo Han en su oído, era muy tentador, pero Heechul quería hacerle sufrir- Se que quieres hacerme sufrir, pero así solo sufres tu- añadió mientras le mordía el lóbulo de la oreja.

El deseo recorría por las venas de Heechul, y las palabras de Hangeng eran tan incitantes, que no pudo más y desato las manos del menor.

Este al verse liberado, agarro la cadera de Heechul y comenzó a embestir más fuertemente, manteniendo la misma posición. Las fuertes estocadas habían logrado dar con el lugar adecuado. Haciendo que Heechul gimiera fuertemente. Las manos de Heechul habían ido a su propio miembro para estimularlo a la misma velocidad que el menor había impuesto.

El olor a sexo impregnaba la habitación, y el sudor perlaba sus cuerpos.

Sus labios se rozaban en cada embestida, quedando como ligeros roces que provocaban cosquillas en ellos.

Las estocadas eran cada vez más rápidas.

-Han- comenzó el mayor- me… voy… a….correr.

-Yo…ah….también- informo el menor.

Entonces ambos comenzaron a sentir como por sus cuerpos eran recorridos por corrientes de placer. La vista de Hangeng se nublo por el placer, y la espalda de Heechul se curvo. Ambos se vinieron, Han en el interior de su amante, y Heechul sobre el abdomen del menor.

Heechul sentía como todo su cuerpo temblaba, debido al fuerte orgasmo.  Se recostó sobre el pecho del menor, con el todavía en su interior. Han abrazo el delgado cuerpo del teñido.

-Dios… Ha sido genial- dijo el menor, mientras acariciaba el cabello de Heechul.

-Si- contesto el mayor, mientras escuchaba, el todavía, rápido latir del corazón del menor- Pero no vuelvas a abrazar a Siwon- le dijo dando un golpe sobre el pecho de han, el golpeado sonrió.

-Vale- contesto dando un beso sobre la cabeza del mayor- Te amo.

-Y yo a ti, tonto- dijo alzando la cabeza para besar esos rojizos y adictivos labios.

Han sonrió en el beso, y giro dejando a Heechul debajo suyo.

-ahora eres tu el que sufrirás- le dijo sobre sus labios, para después volver a besarse.

Un beso que dejaba una expectativa de una gran noche.