sábado, 1 de septiembre de 2012

[YeWook] Un Mal Día

Pareja: YeWook
Genero: Comico, Lemon... tal vez algo extraño de esplicar el genero.
Clasificación: NC-17
Comentario de la Autora: Este Shot, ha sido el ultimo que he escrito, se le llamo mi vuelta al mundo de los fanfictions... hace mas de un año ya... En fin espero que lo disfruteis, y recordad puede contener lenguaje agresivo, y contenido sexual (avisado quedaís). 
Por cierot POV= Point of View, punto de vista de... Se que puede ser un poco molesto, pero es que en ocasiones me gusta jugar con los distintos puntos de vista de los personajes.

Un Mal Día

POV RyeoWook

-Juraría que la había dejado aquí- me dije mientras miraba sobre mi teclado, debajo de mi cama, rebuscaba entre mis carpetas y demás sitio donde mi preciada partitura hubiera podido ir a parar.

Fui hasta al salón donde miré entre las revistas, y las otras partituras. Pero no estaba.

-¿Dónde la dejaría?- me pregunte colocando mi mano sobre mi mentón- la necesito- Me dije mientras bajaba mis manos- Manager hyung se va a enfadar conmigo.

-RyeoWook, te cojo el ordenador un momento- me comentometó Donghae de carrera mientras se sentaba la cocina,  yo solo hice un gesto con mi mano.

¡Necesitaba encontrar esa partitura ya!

Marque el número del manager para informarle de que no encontraba la partitura, recibiendo una reprimenda y “un dentro de dos días quiero esa partitura sobre mi mesa”. Suspirando y haciendo un puchero que nadie vio, me puse de nuevo a la búsqueda.

Me encontraba buscando debajo del sillón, en una postura muy poco decorosa, cuando alguien me hablo.

-¿Qué buscas Ryeo?- me pregunto Sungmin hyung.

-Un partitura, que ponía “El llanto”, ¿La has visto hyugn?- pregunte mientras, le miraba desde el suelo.

Entonces pude apreciar la mirada que Sungmin ponía cuando había hecho algo mal y lo sabía, pero no quería admitirlo.

-Hyung, ¿Has cogido mi partitura?

-No sabía que era tuya- me informo.

-¡Hyung!

-Lo siento Ryeo, pero estaba sobre la mesa, y a mí se me cayó zumo sobre ella- me comento, mis ojos se abrieron en demasía- las notas se borraron, y el papel se deshizo, así que tuve que tirarla- me dijo, yo suspire, y comencé a masajear mi sien esto no podía estar pasándome.

-De acuerdo, fue un accidente- susurre- necesito esa partitura- añadí mirándole serio.

-Ryeo, no la tengo, eso te pasa por usar ese papel.

Yo volví a suspirar frustrado, entonces se me ocurrió algo.

-A lo mejor guarde una copia en el ordenador- comenté en alto.

Corriendo fui hasta mi portátil el cual estaba siendo usado por Hae, pero su cara no era de buenas.

-¿Qué pasa hyung?- pregunté asustado.

-Creo que se ha roto- me respondió mientras me tendía mi portátil.

Yo cogí mi ordenador y comencé a utilizarlo, pero cada vez que intentaba acceder a alguna ventana, salía error.

De repente el ordenador se apago.

-¡Mierda!- exclame frustrado, cosa que asusto a mis hyungs yo no suelo usar ese vocabulario.

-Lo siento Ryeo- se disculpo Donghae, yo le mire, y volví a suspirar, mire al techo. Necesitaba escribir esa canción como fuera.

Estaba frustrado, sabía que no era culpa de mis compañeros y amigos, pero esa canción era importante el manager quería incluirla el próximo álbum, y la necesitaba ya.

Derrotado y bastante cabreado fui hasta mi cuarto donde estaba mi teclado, para intentar componer la canción de nuevo.

POV Yesung

Me encontraba acostado en mi cama, hoy había sido un día asqueroso, realmente asqueroso. Y todo porque me había equivocado en el guion. Sí, sabia cual era el nombre de la invitada al programa, pero un lapsus lo tiene cualquiera, y yo soy humano. Suspirando, y desenado tener algo de tranquilidad, pues entre Kyuhyun y Eunhyuk, se habían encargado de amárgame toda la mañana, me tumbe sobre mi cama.

Necesitaba algo de paz.

Justo en ese momento alguien entro en la habitación. Levanté mi cabeza para ver a mi mejor amigo, y compañero de cuarto, Ryeowook, el cual no tenía mejor cara que yo.

-Hola- saludó escuetamente, lo mismo hice yo.

Tampoco es que tuviera ganas de mucho más. Gire mi cuerpo e intente descansar un poco.

Cuando comencé a sentir que me quedaba dormido, el sonido del piano empezó a inundar la habitación, haciendo que mis nervios se crisparan, cada nota hacia que aumentaran un poco más mi cabreo.

-Esta no era- se decía así mismo, el que en esos momentos me quitaba mi tranquilidad.

Y volvía a darle a las teclas.

-¡quieres parar!- grite, cansado de escuchar el sonido del piano, me gire para mirarlo, el eternal maknae me miraba entre sorprendido y enfadado.

-No, necesito terminar esta canción para dentro de dos días- me informo.

-Me da igual, yo quiero descansar, vete a otro lado con tus ruidos- dije cabreado, mientras me giraba y volvía a recostar en mi cama.

-¿Ruidos?- preguntó y en su voz se notaba que estaba enfadado, y entonces, sí hizo ruidos con su teclado.

Comenzó  a dar golpes con sus puños sobre las teclas.  Me  volví a girar y  me levante de mi cama, y me acerque hasta él.

-Deja. De. Hacer. Eso- dije puntualizando cada palabra, mientras le miraba intensamente.

-No- me desafío, mientras seguía golpeando su teclado mirándome, perforándome con sus ojos negros.

-¡No eres más que un niñato mimoso, y no pienso tolerar eso Ryeowook!, tu hyung te ha dicho que dejes de hacer eso, ¡Así que vas a dejarlo!- exclame cabreado, y agarrando sus manos.

 El me miro, y con fuerza soltó sus manos para después dirigir una de ellas hasta mi cara y abofetear mi mejilla.

-Idiota- me dijo mientras salía de detrás de su teclado y se quedaba delante mío, con su cabeza en alto, mirándome serio o eso intentaba pues notaba como su cuerpo temblaba levemente.

-Inmaduro- conteste mientras le miraba intensamente esos labios que le insultaban tan infantilmente. Me acerqué a él, su cuerpo solo respondió alejándose de mí, como un ciervo asustado. Ese movimiento provocó que chocara contra la puerta, sonreí, pues un quejido había salido de sus finos labios.

Agarre su delicada y fina cara, que en esos momentos se me antojo demasiado sexy, y estampe mis labios contra los suyos sin contemplación provocando que del mismo contacto, su cabeza golpeara contra la puerta.

 Eso no me importo nada en absoluto.

Cogí su ligero cuerpo y lo cargue hasta mi cama, lazándolo.

POV Ryeowook

No sabía cómo, ni porque. No siquiera cuando. Pero actualmente me encontraba sobre la cama de Yesung, con el encima y estaba ¡besándolo!, mejor dicho el me besaba, y de qué forma.

Sus labios, eran exigentes. Succionaban mis labios inferiores, invitándome a comenzar una danza que no parecía tener fin.  Unas de sus manos estaba sobre mis caderas, la otra jugaba con mis cabellos, las mías simplemente se enredaban en su cuello, jugando con los suyos.

El parecía un experto en la materia, y yo un principiante, pero él no parecia quejarse en mi técnica.   Entonces sus dientes mordieron mi labio inferior arrancándome un ligero pero audible gemido. Artimaña que uso para acceder a mi boca, donde su lengua se junto con la mía, mezclando nuestro sabores. El suyo café y menta, el mío posiblemente fresas y chocolate.

Nuestros pulmones clamaban por oxigeno, así que nos separamos, mas nuestros cuerpos no. Su mano la cual estaba sobre mi cadera, se adentro debajo de mi pantalón jugando con el hueso de mi cadera, provocándome un hormigueo que me gusto demasiado.

Sus labios seguían recorriendo mi cuello. Ligeros gemidos escapaban de mis labios entreabiertos, provocando que una risa malvada saliera de los labios de mi hyung.

No necesitábamos palabras. Ambos necesitábamos esto.  Nuestros cuerpos pedían este calmante, que conseguiríamos mutuamente. Habíamos tenido un mal día. Ambos lo queríamos, y yo desde hacía bastante, si era sincero. Quería que él fuera mi primer amante.

Su mano, la cual estaba en mi cadera haciendo cosquillas, subió hasta mi pecho, donde comenzó a jugar sobre la tela, provocándome cosquillas.

Nuestros labios volvieron a unirse en un beso apasionado, aun si cabe más que el anterior, salvaje y demandante.

Mientras nuestras lenguas jugaban, nuestras manos se unieron en la ardua tarea de retirar la camiseta del contrario, que comenzaban a molestar, y que lo único que provocaban era dolor sobre nuestra piel caliente, deseosa de más contacto.

Por lo menos la mía lo era.

Cuando nuestros labios se volvieron a separar, los suyos bajaron por mi pecho dejando un rastro de besos y lamidas, provocando cosquillas y hormigueos que solo hacían acrecentar mi placer, y que la erección que tenía se empezara a marcar mucho más.

Yo también quería probar ese cuerpo. Así que haciendo uso de la fuerza que había conseguido con los entrenamientos, para los últimos discos,  gire el cuerpo de Yesung.

Sorprendiéndole en el momento, pero agradándole al instante.

Haciendo uso de mi lengua comencé a recorrer cada uno de los músculos del pecho de mi hyung, marcándolo, delineándolo, saboreándolo. Con mis manos fui bajando por los costados, llegando hasta los pantalones, donde pude palpar esa erección que ya se hacía presente. Me mordí el labio inferior y mis mejillas se sonrojaron.

-Vamos Ryeo- me dijo con voz entrecortada y demasiado sexy- Chúpamela- añadió mientras bajaba la cremallera de sus pantalones y me dejaba ver sus bóxers negros, donde se podía apreciar la forma de su miembro.

Eso había sido demasiado fuerte, pero debía admitir que me había puesto muy… bueno cachondo, y debía admitir que decírmelo Yesung con esa voz, era demasiado, además de que era algo que deseaba hacer.  

Retire sus pantalones, y contemple de nuevo sus bóxers, donde su miembro se volvía más duro por segundos. Con manos temblorosas acaricie la erección apreciando su dureza. Yesung gimió. Sonreí, no sabía que una simple acción como esa pudiera hacer que mi sereno hyung perdiera los papeles.

POV Yesung.

Ryeo me estaba matando. Dios.

Como se podía ser tan… ¿tierno?, en algo como esto, ¿Cuando lo único que yo quería era desfogarme? Entonces mis pensamientos se volvieron nublosos, pues la lengua de Ryeowook había humedecido la tela de mis bóxers, haciendo que esta traspasara y enfriara la piel de mi miembro. Eso me estaba volviendo loco.

Ryeowook retiro la molesta tela, que cubría esa parte de mí que quería estallar. Sus delicadas manos acariciaron la piel de mi miembro. Eso provoco que gemidos salieran de mi boca, pero a ellos se unieron más, pues a la pequeña y juguetona lengua de Ryeowook, se unieron sus hábiles manos.

Eso era genial.

Su lengua, recorría toda mi extensión, desde la base hasta la punta, haciendo que solo pudiera gemir, mientras  una de sus manos jugaba con mis testículos y la otra la ayudaba en la tarea. Era más de lo que podía pedir. Solo sentía que en cualquier momento perdería la conciencia. Si esta era la primera vez de Ryeo haciendo esto, era jodidamente bueno. Nunca había sentido algo así.

Con dificultad separe la cabeza de Ryeo de mi miembro, y la alce para observar su cara enrojecida.

-¿Lo hice mal hyung?- me pregunto, mientras unas gotas de liquido preseminal se escurrían pos su labio.

-Dios, claro que no Ryeowook- conteste mientras volvía a unir nuestros labios, y cambiando las posiciones, quería estar dentro de ese cuerpo delicado.

Con rapidez desnude al eternal maknae, el cual me miraba entre divertido, y sorprendido.

-Que prisa te entro hyung.

-Eres demasiado deseable pequeño- conteste mientras terminaba de retirar sus bóxers dejándolo en igual de condiciones que yo.

Su cara se enrojeció, yo sonreí enternecido.

-¿Tienes vergüenza?

-Es que esta… es mi primera vez- me respondió tímidamente mientras miraba hacia la mesilla de noche, yo acaricie su cara y le obligue a mirarme.

-Tenía pensado hacerte mío duro- pude ver como se ponía pálido- pero seré bueno- termine mi oración- el suspiro tranquilo- te lo prometo- termine, y con eso acerque mis labios a los suyos sellando esa promesa que nunca había echo a ninguno de mis amantes, y que no sabía porque con él tenía que hacerla.

Mientras nos besábamos, mis manos bajaron pos los costados de Ryeo y suavemente lo acariciaba, para quitar ese miedo, y con cuidado acaricie su erección, provocando que un gemido escapara de sus labios, pero que se perdiera entre los míos.

Separe nuestros labios, para comenzar a besar cada a besar y lamer el cuello del pequeño. Solo le podía oír gemir y suspirar entrecortadamente, y me encantaba.
Seguí descendiendo por su cuerpo, dejando a mi paso un rastro de besos y lamidas, húmedos. El cuerpo de Ryeo era adictivo.

Entonces llegue a esa parte que tanto deseaba. Sonreí.

La acaricie lentamente con mi dedo índice, incitando al pequeño. Un  fuerte gemido escapo de sus finos labios. Quería más de esos.

Ampliando mi sonrisa, baje mi cabeza hasta esa palpitante erección y lamí toda la extensión, desde la base hasta el glande, arrancado un sonoro y entrecortado gemido. Hacer gemir al pequeño era demasiado fácil y gratificante.

Entonces metí ese miembro en mi boca, donde arañe, lamí y succione. Ayudándome de mis manos. Ryeo solo podía aguantar sus gemidos, mordiendo su labio inferior. Pero no le deje mucho tiempo pues le tendí tres de mis dedos, para que los lamiera.

POV RyeoWook

No sabía qué hacer, mi cuerpo no debajo de mandar descargas por todas partes. Se sentía demasiado bien. Solo podía morder mi labio para no gemir más y más fuerte, y clamar por más. Pero mi hyung no me dejo, pues unos dedos, se acercaron a mis labios, pidiendo permiso para adentrarse en mi boca. Supe que quería que hiciera.

Cogí su mano y comencé a lamer esos pequeño pero expertos dedos tal y como él hacia conmigo. No podía evitar que ligeros gemidos escaparan de mis labios, y pues mi hyung era demasiado bueno en lo que hacía.

Entonces sentí que esos dedos se alejaban de mi boca, para comenzar a rondar mi entrada.

-Relájate Ryeo- me dijo sobre mi miembro, provocando que su aliento chocara contra mi miembro provocando que una corriente recorriera mi cuerpo.

Un dedo se introdujo, era una sensación nueva, y que decir que dolorosa, pues me encontraba tenso, eso no debería doler, no cuando se trata solo de un dedo. Pero las atenciones de Joongwoon sobre mi miembro hacían que toda sensación de dolor se disipara, provocando que solo pudiera concentrarme en el placer que sentía cuando juguetona lengua de mi hyung subía y bajaba por mi extensión.

Un segundo dedo se unió, eso hizo que el dolor se acrecentara, pero la hábil mano de mi hyung sobre mi miembro me hizo gemir pero no de dolor precisamente. El tercer dedo se unió, y entonces el dolor aumento todavía más, sentía que el dolor recorría mi columna, pero las continuas atenciones de Yesung me desconcentraban y era algo que agradecía. Los dedos entraban y salían dilatando esa entrada, para algo que yo sabía era algo mucho más grande.

Yesung saco sus dedos. Se incorporo y me miro.

-¿Preparado Wookie?

Le mire, estaba asustado.

-¿Wookie?- me llamo mirándome acercándose, y acariciando mi cara dulcemente.

-Si hyung- dije tan bajito que dude que pudiera haberme escuchado, así que abrí mis piernas dejando que se posicionara entre ellas, el me sonrió dulcemente, me gustaba esa sonrisa.

POV Yesung

No podía dejar de sonreírle, era demasiado tierno.

Me puse entre sus piernas. Agarre mi miembro y delicadamente comencé a adentrarme en su interior. No quería hacerle daño. Si en algún momento sentía deseos de romperlo en dos, ahora eso se había esfumado y solo deseaba dejarle un buen recuerdo de esta vez.

Con cuidado comencé a adentrarme en esa virginal entrada. Su cuerpo se contrajo. Acerque mis labios a los suyos, para comenzar un suave y delicado beso, intentado calmar su cuerpo.

Seguí metiendo mi cuerpo en su interior, lentamente, no quería dañarle. Cuando hube entrado completamente, para todo movimiento, y abrace el delicado cuerpo que tenía debajo de mí.

Podía notar sus lágrimas en mis mejillas.

Separe nuestros labios, y comencé a lamer esas lagrimas que escapaban de sus ojos.

-Avísame- susurré, sobre su oído, y solo espere alguna señal que me indicara que estaba preparado.

Tras unos segundos, que me parecieron minutos, sus caderas se movieron levemente. Pero se movieron.

-hyung- hablo bajito, alce mi cabeza para verle- muévete, quiero que te muevas- me dijo, sus mejillas estaban sonrojadas.

Y yo solo acate esa orden.

Comencé a mover mis caderas, primero lentamente, marcando un ritmo suave al que ambos nos acostumbráramos. Sus uñas se clavaban en mis hombros, las mías en sus caderas.

POV Ryeowook

Era doloroso, pero a la vez me encantaba. Su cuerpo se movía marcando un compas, al cual en seguida me acostumbre. Sentía como su fuerte y duro miembro entraba y salía de mi interior, era una gran experiencia.

Entonces sentí una cosa única. Él choco contra algo en mi interior que me provoco una corriente, que recorrió toda mi columna, y que me hizo gemir fuertemente, provocando que incluso me encorvara.

Mi hyung se dedico a darme en ese lugar continuamente, sus estocadas cobraron rapidez, y fuerza.
Abrí mis ojos, los cuales tenía cerrados, y pude apreciar la imagen más erótica que nunca había visto, ante mi tenia a Yesung sonrojado por el esfuerzo, con su pelo negro humedecido por el sudor, parte pegada a su cara y parte balaceándose a su ritmo. Eso hizo que me encendiera más.

-Hyung más rápido- gemí, el abrió los ojos y me miro, sonrió.

Retiro sus manos de mis caderas, y mientras una la subía hasta el hueco de mi hombro para poder apoyarse, la otra la bajo hasta mi miembro donde comenzó a masajearlo al ritmo de sus embestidas.

Nuestros labios se unieron, en un beso apasionado y fuerte, que más que un beso era un choque de labios debido al ritmo que teníamos impuesto.

Nuestros cuerpos estaban perlados por el sudor, haciendo que la penetración fuera más sencillas, y el simple hecho de que el olor a sexo estuviera aumentado en la habitación nos estaba enloqueciendo.

Mis piernas se enrollaron en las caderas de mi hyung. Yesung se sentó sobre sus piernas, y cargo mi cuerpo provocando que la penetración fuera más profunda.  Arrancando un fuerte gemido de nuestros labios.

Mis brazos se enrollaron en su cuello comenzando un beso, el cual no quería terminar, mientras me impulsaba para subir y bajar por el fuerte y duro miembro de mi hyung, junto con su ayuda. Mi miembro se quedo entre nuestros cuerpo, apresado, siendo estimulado por nuestros movimientos.

Comencé a sentir que el orgasmo quería hacerse eco en mi interior. Y por cómo se comportaba Yesung supe que el también.

POV Yesung.

Sentí que en cualquier momento me vendría. Abrace el delgado cuerpo de Ryeo entre mis brazos y acelere las estocadas.

De repente Ryeowook se vino manchando nuestros pechos. Su gemido quedo acallado entre mis labios. Unos movimientos más hicieron que yo también me viniera en el interior del pequeño, marcándolo por primera vez.

Ambos caímos agotados sobre la cama. Salí despacio del interior de Wook, intentando no hacer daño.

Podía ver como se comenzaba a quedar dormido. Sonreí, estaba demasiado sexy. Y es que esta con su pelo pegado a su frente, sus ojos cerrados por el cansancio y sus labios rojos e hinchados por los apasionados besos que nos habíamos dados.

Me mordí el labio. Lentamente me acerque y deposite un suave beso sobre esos sexys labios de mi dongsae.

El abrió los ojos y me miro. Para después sonreírme.

-Creo que esto ha sido lo mejor del día- me dijo mientras se acercaba a mí y me daba un beso suave.

-Tienes razón- conteste al separarnos- esto ha sido relajante.

Ambos sonreímos, y nos abrazamos.

-Creo que deberíamos planteárnoslo cuando estemos estresados- le dije sonriendo, el me miro y me sonrió.

-Encantado hyung, encantado, pero sabes, todavía estoy algo estresado- me comento sonriendo, haciéndome reír a mi también.

Creo que Ryeo no iba a poder componer esa canción esta tarde, y posiblemente, esta noche tampoco.

1 comentario:

  1. hola :) sabes se me ocurrió la brillante idea de no dejar de escribirte comentarios hasta que me contestes siquiera un HOLA :) sonará un poco psicópata pero necesito que me digas que seguirás el fanfic, por último dime que harás un comeback en diciembre xd jajajaajaja lo esperaría ansiosa :(

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