sábado, 19 de noviembre de 2011

[YeWook] Los celos de Sungmin y el esfuerzo de Yesung

Pareja: YeWook, mencion de KyuMin.
Genero: Romance, Fluf, Yaoi.
Clasificación: PG
 Este fic ganó el concurso del cumpleaños de Ryewook 2011 de Hato, con el primer premio. Espero que les guste^^.


Los celos de Sungmin y el esfuerzo de Yesung

Yesung era un cocinero horroroso. 

Mucho más que Kyuhyun, y eso lo sabía todo Super Junior. Si Kyuhyun era capaz de quemar el ramen, Yesung no era ni capaz de calentar el agua para estos.

Y es que mucha gente dice que freír un huevo es fácil, pero es que para Yesung eso significaba una cosa: quemaduras de 3º grado y una buena bronca de su manager. 

¡Por dios! Si Yesung se cortaba con solo mirar un cuchillo.

Así que si teníamos eso en cuenta, Sungmin no entendía porque su hyung se encontraba en esos momentos encerrado en la cocina. 

Con un libro de postres. 

Bueno en realidad sí, sí lo entendía, pero esto era demasiado extraño.

-Esto es demasiado surrealista- Se dijo mientras miraba desde la puerta, y es que en estos momentos podían pincharle, que no sangraría. 

De eso estaba seguro. 

Se fijo en su amada cocina, la cual estaba toda cubierta de harina y masa, por todas partes: en las paredes, en la encimera, en la mesa… e incluso había en el pelo de Yesung, en su ropa… a decir verdad, Yesung parecía un monigote de masa. 

Verlo era divertido, demasiado divertido. 

-Sungmin,… ¿Qué haces?- preguntaron a su espalda, Sungmin se giró, para observar a Kyuhyun.

-Shhhh, calla- le dijo mientras se llevaba su propio dedo a sus labios, como gesto de silencio, el magnae alzo una ceja.

-No me mandes a aggg- comenzó el magnae pero sus quejas fueron acalladas por un certero golpe de Sungmin, con su codo en la barriga de este.

-Cállate, y observa cómo alguien se esfuerza por quien ama.

Kyuhyun a duras penas se estiro para observar por la ventana de la puerta y ver lo que Sungmin veía. 

En estos momentos, Yesung se encontraba vigilando el chocolate, el cual se estaba derritiendo al baño maría, mientras la masa se hacía al horno.

-¿Qué está haciendo?

-Magdalenas- le contesto Sungmin al magnae- Es tan tierno hacer esto por Ryeowook, es un gran regalo de cumpleaños- decía con voz soñadora y feliz.

-Yo te he hecho grandes regalos de cumpleaños- le contesto Kyuhyun alzando levemente su voz.

-No levantes la voz- le reprendió el chico rosado, mientras le volvía a asestar un golpe con su codo- además ¿Grandes regalos?, ¿Se puede considerar un gran regalo la última edición de Call of Duty?- pregunto retóricamente Sungmin mientras volvía a mirar a Yesung, en su cara había una mueca de frustración.

Yesung, estaba en esos momentos, extrayendo del horno las magdalenas que había hecho. En su cara se podía notar la sonrisa y la satisfacción de haberlo conseguido. Manteniendo esa sonrisa fue hasta donde se estaba derritiendo el chocolate y tras comprobar que estaba en su punto comenzó a repartirlo por encima de las magdalenas de forma homogénea. 

Sungmin y Kyuhyun observaban todo desde fuera. 

-Tiene buena pinta, ahora ¿Sabrá bien?- pregunto Kyuhyun divertido.

Sungmin le miro mal, y le asesto otro golpe.

-¿Y esto por qué?- se quejo mientras se encorvaba por el dolor.

-Porque eres idiota, lo que importa es que Jongwoon-hyung se ha esforzado por hacerle un buen regalo a Ryeowook, aunque se le dé muy mal- le explico como si fuera un niño pequeño.

-Hola- la pareja, sorprendida se giro, para darse cuenta de que en la entrada se encontraba Ryeowook que recién llegaba- ¿Qué hacéis?

Pero el cumpleañero no recibió respuesta, pues la pareja desapareció, huyendo hasta su cuarto.

-Eso ha sido raro- se dijo el eternal magnae a sí mismo.

Sonriendo por los extraños que eran sus amigos y compañeros de grupos, se dirigió hasta donde había estado esos dos, y al abrir la puerta, se encontró con una imagen que le dejo impactado.

-hyung, ¿Qué le has hecho a la cocina?- pregunto sorprendido, y con los ojos abiertos en demasía.

-Yo… esto…- comenzó el mayor y no sabiendo cómo explicarse solo pudo decir tres palabras- Feliz Cumpleaños Ryeowook- le felicito mientras le mostraba dos magdalenas de tamaño mediano donde una tenía una vela con un 2 y otra con una vela con un 5, ambas encendidas. 

Los ojos de Ryeowook se aguaron y su sonrisa se extendió por toda su cara. 

-Es…esto… yo… es… hermoso- decía casi sin palabras, Yesung sonrió complacido.

Ryeowook camino hasta el mayor y le abrazo haciendo que su ropa se manchara también de harina y huevo, cosa que poco le importo.

-Gracias- dijo sobre su oído, para después separarse levemente y darle un ligero pero tierno beso sobre sus labios.

Yesung le abrazo por la cintura profundizando el beso, saboreando esos amados labios.

-De nada- contesto sobre estos.

Se separaron y Jongwoon se sentó sobre una de las sillas que había sufrido su ataque por la harina, en el proceso arrastro a Ryeowook sentándolo sobre sus piernas.

-Pide un deseo- le susurro mientras le abrazaba por la cintura otra vez, Wook agarro sus manos y pensó su deseo.

-Deseo... que mi novio nunca cambie- dijo suavemente, para después soplar las velas, haciendo que Jongwoon sonriera. 

Fuera de la cocina volvían a estar Sungmin y Kyuhyun espiándoles.

-Míralos que lindos- decía Sungmin, con ojos aguados, mientras veía como el mayor cogía con su dedo chocolate que quedaba y ponía sobre la nariz del menor haciendo reír a este- que envidia, ojala mi novio me hiciera esas cosas a mi- eso ultimo lo dijo mirando directamente a este, el cual le miro y sonrió perversamente.

-¿Sabes? Yo te hago otras cosas- y nada más terminar esa frase cogió al chico rosado entre sus brazos y lo cargo hasta su cuarto, provocando que Sungmin riera y no, no volvió a golpearle.

Pero eso… es otra historia.

3 comentarios:

  1. ñaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! me encanto! que tierno el Yewook ! c:

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  2. sheeppp...amo todo el Yewook..no se si he comentDO EN OTRO DE TUS FIC´S PERO YA LOS LEÍ...SON GENIALES :D

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