Genero: Romance, Fluff, Yaoi, Universo Alterno.
Clasificación: NC-17
Encontré a mi mitad por un mordisco
Mientras
caminaba su cabello, negro y largo, era movido al son del viento. Sus ojos ébanos
como la noche, eran reflejo de su fuerza bruta. Su cuerpo hecho de pura fibra,
exudaba maldad y sexualidad. Con su 1.78 de altura, era un arma letal. A pesar
de aparentar no más de 25 años, aunque realmente tuviera más de 300 años.
Su
pálida piel era contrastada con el negro de su ropa. Sus piernas enfundadas en un pantalón de
cuero, hecho a medida, que marcaba fielmente cada uno de sus músculos, eran
deseo de todo ser vivo. Su pecho era tapado con un chaleco también de cuero, que dejaba ver sus
brazos fuertes y letales, además de su marcado pecho.
Con
su andar decidido llego al local Suju, donde
el portero, del mismo le miro fijamente.
-Buenas
noches, Yesung- le saludó el hombre, con una sonrisa, el cual había estado
hablando con otro chico de mirada alegre y hermoso hoyuelo justo debajo del
labio.
-Buenas
noches, Kangin, LeeTeuk- contesto con voz profunda al portero del local y a la pareja
de este, ambos de su especie.
Con
paso tranquilo, se acerco a la barra donde un joven, de alrededor de 23 años, le
miro con lujuria.
-
Hola, Yesung, ya esperaba que hoy no llegaras- comentó - ¿te apetece lo de
siempre?, o ¿prefieres un bocado nuevo?- dijo el joven con voz sensual,
mientras le miraba con deseo, dando a entender el doble sentido de esa frase.
Él
sonrió
-Gracias
Kibum, pero lo de siempre estará bien- él lo miro ceñudo pero le sirvió su
bebida.
Se
sentó en su taburete, y comenzó a examinar el local.
Estaba
lleno de gente de su especie que allí se divertían, vio a su mejor amigo,
Kyuhyun el cual se encontraba besando a Sungmin el novio de este.
O
como Eunhyuk, el vampiro más patoso que conocía, charlaba con un humano de
sonrisa dulce, además de ver a otros tantos buscando una presa como era el caso
de Heechul el cual hablaba con dos hombres a los que sonreía.
Dirigió
la vista por todo el local a ver si encontraba algo que le ayudara a pasar el
terrible aburrimiento que tenia encima, entonces su vista se centro en un joven
de alrededor 22 años, hablaba por el móvil en chino, y al parecer era una
conversación bastante acalorada, por lo que demostraba su cara.
El
joven tenía el pelo castaño oscuro peinado con un corte moderno, esos que te cubren uno de los ojos. El ojo que podía ver era de color negro. Poseía un cuerpo
exquisito, pequeño y delgado, finas facciones y jugosos labios. Era un cuerpo
creado para volverle loco, y era algo de lo que Yesung había notado.
El
joven no estaba sentado muy lejos de él, y para
acortar dicha distancia, se movió
lo suficiente para estar sentado en el taburete que estaba justo a su lado.
El
joven ni se movió, acababa de cortar la conversación pero se le veía claramente
contrariado.
-¿Problemas?-
preguntó al sexy desconocido, mientras cogía su bebida y le daba un trago.
-El
infiel de mi novio, o debería decir ex-novio- decía el joven mientras que con un
movimiento de cuello dejaba a la vista su otro ojo -bueno- continuó con una
sonrisa amarga- por lo menos me libre de ese capullo.
-Brindo
por ello- dijo mientras hacia el movimiento con su copa, y se fijo que él no tenía
trago alguno- Kibum- llamó al camarero- un trago para mi amigo…- empezó
esperando a que el joven dijera su nombre.
-Kim
Ryeowook- le informó extendiendo su mano.
-Kim
Yesung- dijo aceptando su mano- Bueno Kibum,
pues un trago para mi amigo- el joven asintió y comenzó a preparar la
misma bebida que Yesung tomaba.
-Tu
piel, es bastante fría- comento el joven.
-O
la tuya demasiado caliente- le contestó sonriendo.
-Pudiera
ser- afirmo el joven, creyéndose las palabras del mayor, mientras sonreía.
La
sonrisa era devastadora, y hacia qué cosas que no reconocía ocurrieran en su
interior.
En cuanto el camarero trajo la bebida del
castaño, ambos comenzaron a charlar, y tomar sin descanso, esto hizo que Ryeowook
soltara todo lo relacionado con su ex-novio. Le contó que estaba en Corea como
descanso por haber aprobado su penúltimo
año de carrera, y que ahora que estaba
aquí y había roto con su pareja se iba a quedar a vivir, pues solo había ido a
china para estar con Henry, su ex -novio.
A medida que los vasos se vaciaban, Ryeowook
se veía más afectado, pero por el contrario Yesung aguantaba perfectamente,
también tenía cierta ventaja teniendo en cuenta que el alcohol no hacia mella
en los de su género, el metabolismo de un vampiro era mucho más rápido que el
de un humano.
Cuando
ya era alrededor de las 3 de la madruga, decidió llevar al joven su hotel, tal
vez sería suyo otra noche -Wook, ¿Cuál es tu hotel?- le pregunto al joven
ebrio.
-Pues……-
comenzó alargando la palabra- no lo recuerdo- dijo muy confundido- Esto… ¿Me
podrías llevar a tu casa, hasta que recuerde como se llama mi hotel?- le
preguntó rojo, Yesung no sabía distinguir si era debido al alcohol o a otra
cosa.
-Claro-
contesto- Vamos a mi casa.
Tal
vez, si pudiera ser suyo esta noche.
Medio
colgando del moreno, Ryeowook se mantenía si se podía considerar en pie. El
camino no era largo, pero tal vez para un humano ebrio si lo era.
No
tardaron más de 15 minutos en llegar a una casa hecha de piedra, del siglo XIX,
la cara de Ryeowook era de total sorpresa,
-Vaya-
dijo sobre gesticulando- ¿esta pedazo de casa es tuya?- preguntó con asombro.
-Si,
ha pertenecido a mi familia por años, fue construida en el siglo XIX, como regalo
a mi abuela- contesto con tranquilidad.
Entrando
dentro de la casa, Yesung, cogió literalmente, al joven en sus brazos. Puesto
como en el estado del joven no podría subir las escaleras sin matarse, y eso
era algo que él no deseaba.
Cuando
llegaron a la habitación de Yesung, este tendió al joven en la cama, con
delicadeza. Ryeowook estaba asombrado de la majestuosidad de la casa.
Sunnie
comenzó a desvestir al joven, o eso intentó.
-
Oye, grandullón, ¿puedo preguntar qué haces?- le preguntó en un tono enfadado,
pero el hecho de que sus mejillas estuvieran sonrojadas, hacia que su enfado
pareciera menor.
-Bueno,
este grandullón- comenzó señalándose- esta quitándote la ropa, para que puedas dormir más cómodamente- finalizó
con voz profunda, tal vez fruto del deseo de tener al joven sobre su cama,
desprotegido.
-Ah…
vale- dijo sonrojándose más de lo que ya estaba.
Yesung
siguió con su trabajo, su cara estaba pegada a la del humano, peligrosamente,
provocándolo, y eso el joven castaño lo sabía.
Era
una tortura, ver como los ojos de Yesung le devoraban mientras le iba
desvistiendo, y como sus manos tardaban en apartarse de la zona cada vez que
desabrochaba uno de los botones.
Ryeowook
no podía dejar de mirar sus labios, los cuales estaban rojos, y contrataba
deliciosamente con el pálido de su piel,
este le estaba volviendo loco… y como deseaba besarlo.
Cuando
Yesung termino de desabrochar la camisa, subió su mirada para encontrarse con
la lujuriosa del pequeño, era más de lo que podía desear. Ryeowook demasiado
confundido por el deseo que se apoderaba de él, agarro la cara del mayor entre
sus manos, y lo beso.
Un
beso cargado de lujuria y deseo.
Yesung
gimió en el beso, desenado más del joven que le besaba. Comenzó a jugar con la
lengua del joven.
Profundizo
el beso haciéndolo exigente y apasionado. El pelinegro no dejaba de jugar con
sus manos sobre el cuerpo de Ryeowook, una de sus manos, se dirigió al pantalón
del joven, para percatarse de que este, estaba más que excitado.
Wook
no hacía más que pensar en cómo lo tocaba. Con un simple roce gemía, nunca había
sentido tanto placer con algo tan simple.
Sus
manos no se estuvieron quietas, comenzaron a quitarle a Yesung su chaleco,
mientras este, con sus manos buscaba el miembro de Ryeowook y lo tocaba en toda
su longitud, el joven soltó un gemido, al notar como lo tomaba con su mano.
Pero
eso no hizo que él se estuviera quieto, con sus manos, no tan expertas, se
deshizo de la ropa que le quedaba, y las bajo por el formado cuerpo del moreno,
notando todos y cada unos de sus músculos, mientras la fría piel de Yesung le
daba un placer enfriando su ardiente piel.
Era
delicioso, sentir una piel ardiendo bajo él, Yesung adoraba sentirse así, era
por eso por lo que siempre elegía a los humanos para sus encuentros carnales,
era delicioso, sentir ese calor.
Apartándose
lo suficiente como para poder maniobrar, rompió el beso, y comenzó a repartir
suaves besos desde el mentón hacia su pecho, donde lamio, succiono y araño con
sus colmillos la carne que se encontraba por el camino.
Siguió
bajando por el bien formado cuerpo de Ryeowook, hasta llegar al cierre del
pantalón. Desabrocho y bajo la cremallera del pantalón, para después deshacerse
de él. Con sus manos quito el bóxer negro del joven, y dejo libre la palpitante
erección que exigía atención, lo que Yesung hizo gustoso.
Con
su lengua lamio desde la base del pene hasta la punta, disfrutando del sabor
del castaño y placer que le estaba otorgando.
Con una de sus manos masajeaba el miembro, mientras que con la otra pellizcaba
los testículos del joven, haciéndolo gemir. Lo tomo con su boca, disfrutando
del placer que el cuerpo del más joven estaba “sufriendo”.
Ryeowook nunca había sentido tanto placer, ni
siquiera con su ex - novio, y cuando
pensó que no podía sentir más placer, Yesung comenzó a prepararlo para la
intrusión mientras seguía dándole placer con la boca sobre su miembro, uno de
los dedos jugaba en su interior, haciéndolo gemir.
Cuando
el orgasmo estallo en Wook, Sunnie no se aparto sino que se quedo dando placer
hasta que todo el cuerpo, de Ryeo, dejo de temblar por el espasmo.
Pero
Ryeo quería más, y Yesung no había recibido atención ninguna, así que ahora era
su turno, dando la vuelta al asunto, se puso sobre la cadera de Yesung, con
este sentado, rozando su entrada con el miembro del moreno, haciendo a ambos
gemir. Ryeo no aguanto más y lo tomo en su interior, mientras se besaban.
El
vampiro ayudo en sus movimientos al pequeño poniendo sus manos en las nalgas
del joven. Ryeo realizaba movimientos de arriba abajo, haciendo gemir a ambos.
Sus movimientos los cuales habían comenzado lentos, cogieron velocidad
excitando a ambos.
Yesung
sentía como el vampiro que había en su interior, crecía en cada movimiento. Sus
colmillos grandes de por sí, crecieron aun más. Entonces Yesung rompió el beso,
para que no lo notara y enterró su cabeza en su cuello.
El
vampiro de su interior demandaba sangre, sabía que si lo hacia podría
convertirlo en vampiro o matarlo, pero era superior a sus fuerzas y justo
cuando Ryeowook cayó provocando el orgasmo en ambos, Yesung enterró sus
colmillos en ese cuello, que hacía unos segundos había estado besando. El
orgasmo aumento de intensidad en ellos.
Yesung
sin ser consciente de lo que hacía comenzó a tomar la sangre del joven.
Cuando
el placer acabo en los dos, Yesung seguía con sus colmillos enterrados en el
cuello del joven, este último no tenía casi pulso y en cuestión de segundos
perdió la conciencia. Pues el arrebato de pasión, le había casi matado.
Solo
había una forma de mantenerle con “vida” y eso era algo que en su interior Yesung
deseaba, así que saco sus colmillos del cuello y se rasgo la piel de su muñeca,
y dejo que la sangre gotera por la boca del castaño.
Cuando
Ryeo recupero la conciencia, tenia Yeye en su interior todavía, pero ya no
notaba la diferencia de temperatura, y cuando hablo lo hizo con un ceceo.
-¿Qué
me has hecho?- preguntó el joven, mientras le sacaba de su interior y se
palpaba sus ahora largos colmillos, por los cuales estaba ceceando.
-lo
siento- susurro, con arrepentimiento- En medio de mi pasión, me… me desborde y
casi te mato.
Ryeowook
lo miraba incrédulo y totalmente confundido.
-Bueno
técnicamente te mate, ahora eres como yo- finaizo mientras le ayudaba a sentarse.
-¿Qué
ahora soy como tú?, ¡¿Qué me has hecho?!
-te
he convertido en vampiro- le contestó.
No
sabía porque, pero se alegraba de haberlo hecho.
-Pero…,
pero ahora estoy muerto- habló el joven, que todavía ceceaba medio llorando, y
noto como algo cálido salía de sus ojos, con un dedo recogió la “lagrima” y vio
que era sangre- ¿Por qué me has hecho esto?, me tenias que haber dejado morir- susurró
no pudiendo aguantar las lagrimas.
-¡No!-
exclamó con seriedad- no se porque, pero no quería que murieras- habló mirándole-
además ahora eres eterno, y como tu mismo me dijiste no tienes familia, toda
ella esta muerta así que, qué más da- finalizó Yesung, mientras lamia las
lagrimas del joven.
-Pero ahora, soy una bestia, ni siquiera sabía que
era los vampiros existían, yo no estoy preparado para esto- volvió a hablar
mientras más lagrimas caían.
-No,
no llores- dijo Yesung mientras acercaba sus labios a los de él- yo… Me gustaría que te quedaras conmigo- le informo, el joven lo miro anonadado.
-¿Qué
quieres decir con ello?- preguntó sorprendido, mientras se alejaba del moreno.
-Pues,
creo que me has gustado demasiado- le informó el mayor mientras se acercaba y
la abrazaba por la espalda- Yo nunca había perdido los papeles- dijo el mayor
con voz frustrada- Se dice que cuando uno pierde los papeles es porque ha encontrado
a su mitad- añadió mientras lo volteaba para mirarlo a los ojos.
-¿Yo
soy tu mitad?- preguntó sorprendido Ryeowook, y sin creerle. Ni siquiera sabia
lo que era una mitad.
-Si-
respondió seguro de sí mismo- Así que no me dejes- le pidió mientras volvía a
unir sus labios, beso que Ryeowook correspondió a medias- ¿tienes hambre?- le
pregunto después del beso.
-Siento
que me quema la garganta, ¿eso es hambre?- preguntó inocentemente.
-Si-
contestó sonriendo- ven anda, te enseñare a cazar- le dijo sonriendo.
Ryeowook
le dirigió una mirada que el mayor, el cual no supo como catalogarla.
-¡Ah!-
exclamo llevándose la mano a la cabeza- perdona, espérame aquí- dijo el mayor-
voy a buscar una chaqueta, pues aunque no sintamos frio debemos cubrirnos, los
humanos pueden sospechar.
-Claro-
asintió el joven, entonces el mayor de los dos subió por las escaleras perdiéndose
de vista.
Ryeowook
aprovecho esto para salir lo más rápido posible de allí. Abrió con cuidado la
puerta y salió, tan rápido como pudo.
Una
cosa era que se hubiera acostado con él, un momento de pasión lo sufre
cualquiera además tenia que admitir que el chico era guapo y estaba tremendo,
pero era pasar de eso a tener que aceptar que era un vampiro y además de eso
que era la “mitad” del otro, eso era demasiado para el pequeño.
POV
Ryewook
Con
pasos rápidos comencé a moverme. No quiera que me alcanzara, así que comencé a
correr lo más rápido que pude. Me di cuenta que la velocidad de mis movimientos
eran demasiado rápidos, pero no me importaba. Veía todo Seúl pasar por mis ojos
a una velocidad vertiginosa.
Esto
de ser vampiro era extrañamente divertido.
Tan
metido estaba en mis pensamiento que no vi como me acercaba velozmente a
alguien, por lo que no pude parar antes de chocar. Ambos caímos al suelo.
-Mira
por donde vas- me dijo una voz masculina y fuerte.
-Yo…
lo siento- susurré desde el suelo, mientras sentía el miedo recorrer mi cuerpo,
siempre me había dado miedo ir solo por la calle, además los chicos que estaban
enfrente mío, eran dos, y tenían un aspecto que me daba miedo. No era por nada
pero tenía esa aura que tenía también Yesung.
-
No me di cuenta- volví a hablar mientras me incorporaba- Iba metido en mis
pensamiento, lo siento de verdad- me disculpe, para después girarme. El aura
que les rodeaba no me gustaba.
Pero
entonces, uno de ellos, el más bajo, con el que no había chocado, me agarro de
un brazo, tenía mucha fuerza. Y comenzó a olerme.
¡olerme!
-Hueles
a Yesung- dijo bajito, un escalofrió recorrió mi cuerpo.
-¿en
serio?- preguntó el otro, entonces también se acerco para olerme- Tienes razón.
-Disculpadme-
hablé mientras intentaba quitar el agarre del otro, pero me era imposible era
muy fuerte.
-Un
momento- me dijo el que me tenia agarrado- tú estabas en el bar Suju antes- afirmó,
yo asentí asustado- Lo sabía, me sonaba tu cara- comentó mientras en su cara se
formaba una sonrisa, la cual me resulto agradable- pero eras humano- susurro mientras
miraba mi cara, como analizando mi rostro- Eres un crio- sentencio.
-¿Qué
quieres decir?- preguntó el chico con el que había chocado- Que Yesung le
convirtió- dijo mientras me miraba- es cierto eres un crio-
-Perdonad
no se dé que habláis- comenté mientras me sentía más y más impotente, además el
quemazón de la garganta aumentaba- ¿me dejáis ir?- pregunté con voz débil-
-¿Por
qué te convirtió?- preguntó el más alto ignorando mi pregunta, mientras me
miraba intensamente- Dime.
-Yo
no sé de qué me habláis.
-No
mientas- casi exclamó el más alto, que parecía hasta enfadado su mano también
había ido a parar a mí otro brazo apretándolo fuertemente- Y dime.
-No
lo sé- conteste casi llorando, mientras sentía que el brazo me dolía mas- el solo
me dijo que se descontrolo.
-Yesung
nunca había convertido a nadie- me informó mientras me soltaba, el más bajo me
seguía manteniendo agarrado.
-Kyu-
le llamó este- no te enfades es un niño- dijo mientras me miraba y sonreía-
¿Yesung no te dijo mas nada?- me pregunto mientras me miraba su mirada era
tierna y dulce, como la de un hermano mayor.
-El
me dijo de que era su mitad- conteste mientras el dolor de mi garganta empezaba
a ser imposible de aguantar.
-¿su
mitad?- preguntaron los dos a la vez, yo asentí- ¿crees que hyung haya
encontrado su mitad?- preguntó el más alto, parecía sonreír.
-Puede
ser Kyuniie- contestó el que me tenia agarrado, pues me acababa de soltar.
Yo
notando que no me miraban me gire y me eche a correr, pero ambos no tardaron en
alcanzarme, volviendo a agarrarme del brazo.
-¿Por
qué corres?- me pregunto el más bajo.
-¿Por
qué no estás con Yesung?- me pregunto el más alto.
-Tengo
miedo- fue mi respuesta para ambas preguntas.
-¿miedo?,
¿Por qué?- preguntaron los dos al unisonó.
-Porque
no es muy normal que te acuestes con alguien, y cuando despiertes te des cuenta
que tienes colmillos y que ahora eres un vampiro, y para colmo que alguien te
diga que eres su “mitad”- casi escupí las palabras, mientras llevaba mis manos
a mi garganta el dolor me estaba dejando atontado, casi provocando que mis
sentidos se dispersaran dejándome casi ciego, ademas sentía que las lagrimas se
agolpaban en mis ojos.
-¿no
has comido?- me preguntó el más alto, yo negué con la cabeza- ¿Desde qué te
convertiste?- volvió a preguntar yo volvía negar- Mierda tío- dijo mientras me
miraba- ¿Yesung no te dio de comer?- me preguntó mientras sus ojos eran de
enfados.
-Me
escape antes de que me enseñara a cazar- contesté, la voz me costaba
articularla.
-Mierda
vas a entrar en frenesí- me informó- vamos tienes que comer.
-¿Qué?-
pregunté casi sin voz.
-Frenesí,
es si no comes nada, entonces tu cuerpo se descontrolas. Pierdes el control de sus acciones y puedes
provocar verdaderas catástrofes- me informó el más bajo, mientras caminábamos-
Por cierto yo soy Lee Sungmin, y este- dijo señalando al que estaba a su lado-
es Cho Kyuhyun- añadió sonriendo, entonces este se fue hasta un banco, y el más
alto me llevo detrás de un arbusto.
No
entendía nada.
-Fíjate
como Sungmin caza.
Entonces
observe como el chico, se sentaba en un banco, su aspecto pasó a ser infantil,
sus piernas se columpiaban, y tenía una tierna sonrisa en los labios. Un tipo
se le acerco, tenía en sus ojos una mirada lasciva, que me daba asco.
-Pequeño
¿estás solito?- le pregunto.
-Si-
contestó él, con voz infantil.
-Oh,
entonces te hare compañía- dijo mientras se acercaba, entonces cuando el hombre
estuvo bastante cerca de él, Sungmin le susurro un “duérmete” al odio, el
hombre cayo al lado de Sungmin en un profundo sueño.
-Ven-
me llamó a mí, yo fui hasta allí seguido de el más alto.
-¿Qué
hago?- pregunten sin entender.
-Acerca
tus labios hasta el cuello de el- le mire con cara de asco- quita esa cara- me
dijo riendo, yo asentí, aunque me seguía dando asco, y acerque mis labios hasta
el cuello del hombre- ahora comienza a oler la zona, habrá un momento donde un
sabroso olor te golpeara, entonces tu cuerpo sabrá que hacer.
Así
que yo comencé a realizar lo que Sungmin me había dicho.
Comencé
a oler la zona, el olor era normal, pero entonces una zona olió deliciosa. Mi
cuerpo actuó por cuenta propia, mis colmillos se clavaron en la zona, dejando
pasar un sabroso líquido el cual se expandió por mi boca. El sabor era
extraordinario, nada nunca me había sabido también. El caliento líquido caía
por mi garganta calmando el ardor.
Había
dejado de ser consciente de lo que pasaba a mí alrededor.
-Para-
me dijo una voz, haciendo que volviera a ser consciente de mis actos- no lo
mates- añadió, yo separe mis colmillos del cuello, mientras relamía mis labios,
todavía sentía los colmillos grandes, pero me estaba acostumbrando a ellos.
-Lame
la zona que has mordido- me dijo Kyuhyun, yo hice lo que me había pedido, viendo
como las marcas desaparecían ante mi sorprendida mirada- Vamos- añadió haciéndome
levantar, Sungmin coloco el cuerpo del hombre en el banco, y se coloco también
detrás junto con nosotros.
-Despierta-
susurró, el hombre abrió los ojos, tenía una mirada aturdida pero se levanto y
se fue desapareciendo de nuestras vista.
-¿Por
qué me hicieron parar?- pregunté.
-No
puedes tomar toda la sangre de un cuerpo- me informó Kyuhyun- si lo haces y
matas a la persona, entonces tú también mueres- añadió mientras salíamos del
escondrijo-
-¿Por
qué?
-Porque
los vampiros no podemos tomar sangre en dos tipos de casos- empezó - 1º caso,
si tomamos sangre de un muerto morimos, 2º caso si tomamos sangre y mientras lo
hacemos el corazón de la persona se para también morimos- finalizó – Por
cierto, ¿Cómo te llamas?.
-Kim
Ryeowook- contestó una voz a nuestra espalda, la cual reconocía.
Los
tres nos giramos para encarar a Yesung, el cual me miraba.
-Hyung-
dijo Kyuhyun sorprendido.
-Te
estaba buscando- me habló el que era mayor, mientras se acercaba hasta mi- ¿no
sabes lo peligroso que son las calles para un vampiro recién convertido?- me
preguntó mientras sus manos se cernían a mis brazos zarandeándome.
-Hyung,
calma- habló Sungmin- No lo asustes más- añadió, Yesung me soltó, mientras se
giraba frustrado.
-Tienes
suerte que te encontraran Sungmin y Kyuhyun- habló mientras me miraba como una
padre mira a un niño pequeño que ha hecho una travesura- ¿Qué hubiera pasado si
hubiera sido alguno de mis enemigos?- me preguntó mientras gesticulaba.
-Medio
miedo- contesté mientras le miraba- No es normal que te despiertes y te digan
que eres un vampiro, y menos que eres la mitad de alguien- añadí mientras le
miraba yo ahora a él- lo cual sigo sin entender- finalicé mientras cruzaba mis
brazos.
-¿no
le explicaste que era mitad?- preguntó Kyuhyun.
-No
me dejo- contestó señalándome con un dedo- Si ni siquiera pude enseñarle a
cazar como voy a explicarle nada- dije mientras el también cruzaba los brazos
infantilmente.
-Vale,
calma- habló Sungmin- Ryeowook- me llamó- ¿puedo llamarte Wookie?- preguntó con
una mirada infantil-
-Claro.
-Bueno
Wookie- dijo sonriendo- Mitad es el termino que se usa para definir alma
gemela, media naranja- me informó- Los humanos viven toda su vida esperando
encontrarla, pero carecen de la capacidad para detectarla- me dijo mientras
entrelazaba sus dedos con los de Kyu, el cual sonrió- pero cuando eres vampiro
desarrollas esta capacidad- añadió mientras sonreía- Cuando uno de los dos es
vampiro, siente la irremediable necesidad de estar junto con esa persona,
aunque sea humano, su cuerpo cae en la tentación de morderle, como le ocurrió a
Yesung, no puede controlarse- Yesung dirigía su mirada a mí, la cual yo solo
intentaba evitar- cuando ambos son vampiros, las cosas son más sencillas- finalizó
sonriendo, y su mirada fue hasta Kyuhyun.
-Ese
fue nuestro caso.
-
¿sois mitad?- pregunté mirándolos, ambos asintieron.
-Nos
conocimos hace ya más de 50 años- contestó Sungmin, mis ojos se abrieron en
demasía.
-¿Qué
edad tenéis?- pregunté sorprendido.
-Pues
yo tengo 150 años- contestó Sungmin.
-Yo
tengo 100- habló el mas alto.
-Yo
tengo 300- la voz de Yesung sonó justo detrás mía, su aliento rozo mi cuello,
haciéndome dulces cosquillas, pero yo no me iba a dejar caer, no hasta que
tuviera las ideas bien claras.
-Que
pasada- dije sorprendido.
-Bueno,
pues eso, Kyuhyun y yo nos conocimos hace ya más de 50 años, fue en una fiesta,
fue mirarle y sentir que el mundo dejaba de existir- termino de hablar para después
dirigir su mirada a Kyuhyun.
-Yo
sentí lo mismo, y hasta que nuestros labios no se unieron la sensación no
desapareció- añadió mientras abrazaba por la espalda a Sungmin- ¿Tú tienes esa
sensación hyung?- preguntó mirando a Yesung- ¿Qué tu estomago pesa?, ¿sientes
lo que se llaman las mariposas?, ¿qué
cuando lo miras tu cuerpo responde solo? y ¿qué solo con mirarle a los ojos
estas feliz?
-Si-
contestó Yesung, con voz entrecortada, eso era muy embarazoso.
-El
es tu mitad- respondió Sungmin sonriendo.
-¿pero
porque yo no siento nada de eso?
-porque
no eres un vampiro completo- me informo Kyuhyun-
-No
entiendo.
-Cuando
unos es convertido, tiene que pasar un día para que su cuerpo se adapte a la
nueva situación- me dijo Sungmin mirándome- mientras no puedas controlar el
crecimiento de tus colmillos serás un vampiro incompleto, mañana cuando
despiertes por la noche serás finalmente un vampiro- finalizó mientras apretaba
el abrazo que Kyuhyun le estaba dando.
-Entonces
sentiré todo eso cuando le mire- dije mientras miraba a Yesung, los otros dos asintieron-
Eso es algo extraño.
-Lo
sabemos- dijo Yesung- pero es nuestra realidad.
-Son
las 5- interrumpió de repente Sungmin- será mejor que nos vayamos para que el
sol no nos alcance- dijo, Kyuhyun asintió, ambos se despidieron de nosotros y
se fueron-
-¿te
vienes a mi casa?- preguntó Yesung poniéndose delante de mí.
-Yo…
no se.
-Es
tarde, y todavía no recuerdas donde está tu hotel ¿verdad?- yo negué con la
cabeza- quédate en mi casa, mañana te vas si quieres- me dijo, pero pude leer
en sus ojos que no deseaba eso.
-De
acuerdo- él agarro mi mano y me condujo hasta su casa, el tacto de su piel, no
me era ahora frio, es mas su tacto era caliente, posiblemente debido a que
ahora también la mía era tan fría como la suya.
El
camino paso en silencio. Me preguntaba seriamente si de verdad era el mi mitad.
¿Podría ser? En el fondo sentía que eso no me molestaba, el era guapo, y por lo
poco que había hablado con él, me había llamado la atención.
Cuando
llegamos a su casa, me condujo hasta su habitación.
-Perdona,
no tengo más- me informó- Tu quédate aquí, yo dormiré en el suelo.
-No-
dije mientras le agarraba del brazo, no sabía porque lo había hecho- durmamos
juntos, al fin de cuentas, ya lo hemos hecho- añadí, creo que si pudiera mis
mejillas se tornaría rojizas, el asintió.
El
me tendió lo que parecía ser unos pantalones de dormir, y se puso otros él. Me
quede sorprendido siempre había pensado que los vampiros dormían en ataúdes y
cosas así. Pero nada que ver. Yesung estaba acostándose en la cama y tapándose
con las sabanas de seda negra. Yo le imite.
-Buenas
noches Ryeo- me dijo mientras se giraba dándome la espalda.
-Buenas
noches, hyung- susurre mientras me acomodaba entre las suaves sabanas, y mis
parpados cayeron en un profundo sueño, casi inmediato.
Cuando
me gire para mirar el reloj, el cual estaba en la mesa de noche que había mi
lado. Eran las 20:00, ya era de noche, había dormido todo de un tirón sin darme
cuenta, palpe con mi lengua los colmillos y estos estaban totalmente recogidos,
tal y como los había tenido siempre.
Entonces
algo se movió a mi lado. Yesung comenzaba a despertar, gire mi cuerpo para ver
como despertaba. Y la imagen que vino a mi fue hermosa. Su pecho desnudo me
dejaba ver su formado cuerpo. Sus ojos los cuales comenzaban a abrirse me
miraron.
-buenas
noches- me saludó mientras sonreía tiernamente, mi corazón palpito fuertemente.
Entonces
todas las cosas que Sungmin y Kyuhyun habían contado, me comenzaron a pasar.
Sentí
que un grupo de mariposas jugaba en mi estomago, el mundo había dejado de existir,
y me sentía feliz con solo mirarle. Sus ojos eran hermosos, mas de lo que
recordaba y sus labios me incitaban.
-¿Qué
tal has pasado…- pero no le deje terminar, pues mi cuerpo actuó solo haciendo
que nuestros labios se unieran en un tierno beso, cuando nos separamos las
mariposas desaparecieron pero la felicidad seguía ahí- la noche?- completo
después del beso, totalmente ido.
-bien-
contesté sonriendo, mientras él me miraba.
-Entonces,
¿esto quiere decir que sentiste lo mismo?- me preguntó mirando, yo asentí- ¿me
vas a deja?-
-No
puedo- contesté mientras le acariciaba su hermosa cara, apartando algunos
cabellos que cubrían sus ojos- Mi cuerpo no me deja- finalicé sonriendo, el
también sonrió y volvió a unir sus labios con los míos.
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa loame !!!!!!!!!!!!!!!!!!!! qaaaaaaaa kya lo ame completa mente!!!
ResponderEliminarawwwwwww super lindo!!! como lo dije antes soy tu fan!!!! aww me encanto el yewook!! tan cute!!
ResponderEliminarque hermoso destinado a estar juntos para la eternidad
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